Ilusiones a flote

... Son los náufragos modernos de Rancinan: "La balsa de las ilusiones" inspirada en el célebre cuadro de Géricault, pero dos siglos después... Un océano de petróleo, modelos propios del S.XXI, ropa de marca hecha jirones y un ambiente tenebroso de preocupante vigencia. Ahora más que nunca toca esforzarse, valorar lo que tenemos, innovar, reír mucho, viajar cerca o lejos, soñar, aguzar los sentidos y reflexionar sobre todo lo que está sucediendo. Recordemos que no es el mar el que nos hace naufragar, sino solamente una ola: de ésa hay que salvarse...
Gracias, maestros. ¡Feliz verano a tod@s!

Nighthawks

Irrumpe Hopper en el Thyssen y, como en los cánones de Fitzgerald, la noche se hace suave: paradoja en estos días de rescates, primas de riesgo, recortes, incertidumbre e ilusiones compartidas -y que no cesen- para escapar del abismo que plasman los lienzos del poder. El arte tiene esas cosas: distrae del mundanal ruido, inspira, provoca, absorbe y emplaza a soñar que vendrán tiempos mejores. Ánimo a tod@s.

En Fuera de Juego

... Entre tanto viaje y desvelo también hemos sacado tiempo para quedar con mucha gente en Madrid; por ejemplo, celebramos el cumpleaños de un tipo único en su especie –Chisco Arias- y en la fiesta no faltaron amigos como Jesús Taltavull. Precisamente, mis cómplices -con premeditación y alevosía- en aquel programa tan profesional como disparatado que se hizo relativamente célebre desde una humilde radio: “Fuera de Juego”. Y de ahí la génesis de este blog, de vocación heterodoxa y cuyo nombre está de moda no sólo por mis eventuales genialidades (!), sino por la película que se ha estrenado en España. Una historia que trata de fútbol -el deporte rey después de cazar elefantes- y que irrumpe por casualidad en tiempos de Eurocopa: pasión, espectáculo y gloriosas expectativas para La Roja. Y de rebote, más visitas por estos lares... Así, queridos lectores, aprovecho para agradeceros la compañía virtual porque me consta que ahora mismo hay alguien curioseando, picoteando o despotricando de estas reflexiones acaso desnortadas. La próxima vez -aunque lo manden los cánones- no hablaremos del gobierno porque han pasado muchas cosas de mayor interés, como la "primada": acontecimiento planetario que demuestra que no existe casi nada mejor en la vida que hacer el primo. Y lo que nos queda, familia. Seguimos, pues, en fuera de juego.